Alguien me dijo que debo ser consciente de que esta forma de ver las cosas no me ayuda nada. Que no voy a conseguir estar bien si pienso continuamente cosas como: soy incapaz de avanzar, de decidir, de olvidarte, de perderte, de dejar de sentirme mal, de tener ganas, de sentir culpabilidad, de encontrar el camino. Que debo cambiar mi teoría y aplicar la del pensamiento positivo. Sustituir mi discurso por: podré avanzar y te olvidaré, y no pasará nada por haberte perdido. Dejaré de sentirme mal y tendré ganas. Ya no me sentiré culpable por desperdiciar mi vida y en algún momento encontraré el camino. Y aunque es ir un poco a contracorriente de mi naturaleza, vale, me has convencido, lo voy a intentar.
Ahora convence a la boca de mi estómago.