...demasiado reflexiva para el que no quiere pensar,
demasiado alocada para quien no se deja llevar.
Inútilemente coherente para quien sólo usa la piel
y más que muy incongruente para el que mide antes de hacer.
Soy activa para los lectores empedernidos,
una estatua para el que no encuentra nunca su camino.
Soy el recuerdo evaporado de la lluvia de verano,
las caricias ausentes que traspasan la mente.
Los besos robados en el portal,
la que no calla cuando no quieres hablar.
Soy el punto final seguido de mil palabras,
la que nunca se quiere ir
y te busca hasta debajo de su almohada.
Soy sentimientos razonados emocionalmente controlados,
la que te abraza mientras duda si te quiere,
la que te adora cuando me hieres.
Soy tormentas sobre el mar,
y arena de un desierto para asfaltar.
Soy la nada que me traga.
La que desearía morir siendo aspirada.
La que te regala la piel, la que conserva tu olor,
la que no olvida tus palabras,
la que colecciona miradas.
Soy temerariamente responsable,
la que sucumbe a los detalles.
Me apago ante cada estrella,
y despierto las noches de luna llena
La que no deja de soñar,
la que esta harta de imaginar.
Soy volcán dormido por tus ayeres desvanecidos.
La que no te olvida,
la que te llora,
la que todavía te siente
la que siempre te añora.
1 comentario:
Publicar un comentario